La Reserva Comunitaria Junín está ubicada en la Cordillera del Toisán en la parroquia rural García Moreno. Esta parroquia junto con otras cinco del cantón de Cotacachi y otra de Otavalo, conforman la zona de Íntag, demarcada por la cuenca del río del mismo nombre, dentro de la provincia de Imbabura, al noroccidente del Ecuador. Íntag no es una zona políticamente reconocida, es más bien una zona que por sus características y conexión desde el poblamiento, se ha establecido como zona y planifica de forma coordinada. Políticamente las parroquias de la zona de Íntag colindan al norte con la provincia de Esmeraldas, al sur con la provincia de Pichincha, cuya capital es Quito, la capital del Ecuador.
Clasificación del caso
Este caso se centra en un territorio amenazado por la minería a gran escala en donde las comunidades han construido estrategias para proteger su espacio de vida ante la amenaza. Una de las estrategias emprendidas para detener el avance del extractivismo minero a nivel de la zona de Íntag, ha sido la creación de reservas comunitarias para la protección de bosques nativos de gran importancia biológica frente a la amenaza minera. Para ello se han hecho compras de predios con bosque nativo a otros propietarios para manejo comunitario.
Una de estas reservas, la más amenazada por encontrarse en un área donde se han concentrado trabajos de exploración minera en la década de 1990 hasta la actualidad, es la Reserva Comunitaria de Junín. Esta Reserva fue creada en 1998 para proteger y reapropiarse de un bosque que había sido afectado por actividades de exploración minera, y para buscar iniciativas que no lo pusieran en peligro. Se compraron predios donde había bosque nativo amenazado por la minería a otros propietarios de la comunidad, con la finalidad de controlar estos predios y declararlos reserva o bosque protector.
La reserva fue una estrategia de protección del territorio ante la mega-minería, pero también una expresión de la concienciación ambiental de parte de la comunidad de la necesidad de proteger sus bosques y fuentes de agua en una zona con un alto índice de deforestación. Es una iniciativa relevante por ser ejemplo de la toma de conciencia ambiental a través de un conflicto ambiental, pero también como una propuesta que ayudaría, enmarcada en una política regional, a detener los altos índices de deforestación de Íntag.