Como comunidad, desde 1948 empieza a plantear su demanda y derecho al territorio en la región. Cabe señalar que es en 1971 cuando se internan las primeras incursiones de las colonias aimaras: Bella Vista, Buenos Aires, Yurumani, Villa Florida, cerrando las fronteras que existían en la región. Es en este momento que la comunidad desarrolla planes de crecimiento y de cultivos pero debido a su menor población no logra conquistar toda la extensión existente.
Es en 1995, con la reforma de la Ley INRA, que se logra consolidar el territorio, pero sin solucionar los problemas limítrofes hasta nuestros días. Por este motivo se conforma la central agraria Kelequelera, una herramienta importante para exigir su derecho, reconocido por el Estado constitucionalmente, para el manejo, uso de la tierra y explotación de sus recursos de manera apropiada ancestralmente. Con este objetivo específico, el manejo de sus recursos y los planes de identidad propia, es que la comunidad desarrolla sus proyectos de regulación, manejo de tierras y límites, apoyada en el municipio de La Paz. Pero aún existía un problema principal: en 1995 la personería jurídica de Organización Territorial de Base (OTB) ubica a San Juan de Kelequelera como territorio del municipio de Guanay.
En 2008 la comunidad de Kelequelera reconoce su pertenencia a la provincia Murillo, y en voto resolutivo de 2013 confirman su pertenencia al municipio de La Paz. En 2016 se realiza la primera sesión del Concejo Municipal de La Paz en San Juan de Kelequelera. Este mecanismo de pertenencia es importante para poder resolver el problema de saneamiento de tierras a través del INRA y también obtener la personería jurídica de la comunidad. Para que proceda el saneamiento de su territorio, la comunidad debe demostrar su pertenencia al municipio de La Paz mediante otra personería jurídica.