Retomando la tierra para organizar una comunidad
El problema de la tierra en Paraguay no solo es un problema histórico que data de finales de 1800, sino que también es un problema que se acrecienta, tanto por el proceso constante de concentración de la agroindustria sino también porque los hijos y las hijas de familias campesinas que algunas vez accedieron a un pedazo de tierra, y hoy constituyen una gran masa de campesinos sin tierra. Según un estudio del año 2010, ascienden a trescientas mil familias.
El caso de Reconquista es un ejemplo de una pequeña porción de tierras que vuelve a mano de campesinos. Este es uno de los tantos ejemplos de las llamadas tierras malhabidas, es decir, tierras públicas que deberían haber sido entregadas a familias campesinas, según lo estipula el Estatuto Agrario, y que fueron arbitrariamente distribuidas a amigos del poder político, tanto durante la dictadura del Gral. Stroessner como durante gran parte de la década del 90 por personajes cercanos al Partido Colorado. Según el Informe de la Comisión Verdad y Justicia existen cerca de 8 millones de hectáreas de tierras fraudulentamente adjudicadas.
En este caso específico, históricamente la tierra que es ahora denominada Reconquista pertenecía a familias campesinas hasta que en el año 1984, por orden del dictador Alfredo Stroessner, fueron desalojadas y entregadas a un empresario amigo suyo (Fahd Yamil) que las destinó al cultivo del café e instaló una fabrica en lavmisma. Al poco tiempo de caer en la dictadura stronista (1989), el empresario se declara en bancarota y la propiedad de 2. 904 hectáreas pasa a manos del Banco Nacional de Fomento, que en el año 2000 es llevada a remate.
Posteriormente, el Banco Nacional de Fomento fracciona la tierra y la vende a tres propietarios distintos, por un lado una empresa noruega adquiere 2.260 has. un particular 317 has. y un empresario de apellido Salas adquiere una de las fincas de 327 hectáreas , un poco más retirado de las demás.
En el año 2004, ante el abandono de la propiedad adquirida por Salas y el origen espurio de las mismas , campesinos de la zonas empiezan a organizar la ocupación, tarea que estuvo a cargo de la Organización Campesina Regional de Concepción (OCRC).
En el año 2005, se legaliza la Comisión de Sin Tierras con el reconocimiento del INDERT y se inicia el proceso de gestión para acceder a la misma. El 21 de noviembre de 2005, ante la falta de respuesta, se decide hacer la ocupación de las 327 hectáreas adquiridas por Salas.