Fuente: Prensa Rural
Para los días viernes 6 de julio y martes 7 de agosto han sido convocados en el territorio nacional y en varios países del mundo, la realización de plantones y concentraciones populares para exigir al Gobierno Nacional que pare el exterminio de líderes y lideresas sociales, que a la fecha pasa la cifra de cien luchadores populares muertos a manos de grupos de extrema derecha -paramilitares- en el último año.
Las jornadas son impulsadas por organizaciones sociales, defensores de derechos humanos, organizaciones campesinas e indígenas, sectores y fuerzas políticas, preocupadas por el incremento a diario de los asesinatos, persecución, señalamientos, encarcelamiento de principales voceros de las comunidades y sus organizaciones sociales y comunitarias, quienes vienen reclamando soluciones a sus peticiones de Paz con justicia social, tierras, empleo, vida, vivienda, agua, cese a la megaminería, defensa del medio ambiente y biodiversidad, o simplemente por adoptar una posición firme de oposición frente a las políticas de guerra y violencia que pregona la extrema derecha y los paramilitares encarnados en el Centro Democrático y el presidente electo Iván Duque.
Para el viernes 6 de julio, a partir de las 6:00 de la tarde en las principales plazas del país y embajadas y consulados en el mundo serán sitios de plantones de protesta.
Por su lado, el ex candidato presidencial de la Colombia Humana, Gustavo Petro, convoca a realizar el martes 7 de agosto una movilización del pueblo colombiano para pronunciarse públicamente en defensa de los Acuerdos de Paz y en rechazo a la iniciativas que viene tomando el parlamento y el presidente electo de hacer trizas lo pactado en La Habana (Cuba), entre la entonces guerrilla de las FARC-EP y el Estado colombiano, en cabeza del presidente Juan Manuel Santos Calderón.
Ya se ha anunciado en Bélgica una jornada contra masacre de líderes sociales colombianos, bajo la consigna No Más Muertos, en la ciudad de Bruselas, el 6 de julio a las 18:00 UTC+02 frente a la Embajada de Colombia, por lo que convocan a los compatriotas que residen en otras naciones para que hagan lo mismo en cada país, llamando a la comunidad internacional a exigir a las autoridades y gobiernos a presionar al gobierno colombiano para que cese el baño de sangre.