En el primer semestre del 2016, las áreas con presencia de explotación minera han reportado el mayor número de conflictos sociales en el Perú. La megaminería acapara tierras e impacta en las fuentes de agua de los pobladores de esas áreas.
En este 22 de julio, Día Mundial contra la Megaminería, el Reporte del Primer Semestre del Observatorio de Conflictos Mineros en el Perú, con base en datos del Defensor del Pueblo, registra más de 200 casos por mes de conflictos. La mayoría es conflicto socioambiental, y dentro de esa categoría el principal problema lo plantea la minería.
Para definir a una región como de influencia minera, el Observatorio toma en cuenta el peso o aporte de la minería en la economía de la región: por lo menos un 4% de la actividad económica regional. Con ese criterio, 14 regiones del Perú son consideradas “mineras”: Ancash, Arequipa, Ayacucho, Cajamarca, Cusco, Huancavelica, Ica, Junín, La Libertad, Madre de Dios, Moquegua, Pasco, Puno y Tacna.
En la región de Apurímac se destaca el caso de Las Bambas; en el Cusco, en la provincia de Espinar y su vecina Chumbivilcas, está el proyecto Constancia de la canadiense Hudbay, y en varias provincias de Puno predominan conflictos alrededor de la minería ilegal. Los pobladores locales, cuya actividad es el trabajo de la tierra, han protagonizado protestas en defensa de la tierra y de sus fuentes de agua afectadas por la explotación minera, así como denunciando la alta contaminación de los pasivos ambientales.
El informe puede ser revisado aquí
Día contra la Megaminería
Distintas organizaciones en el mundo han convocado a manifestarse este 22 de Julio en el marco del Día Mundial contra la Megaminería, en una jornada internacional de defensa del agua, la tierra y la vida. La idea es instalar plantones frente a las residencias gubernamentales o palacios legislativos para declarar la opción por una sociedad, una economía y una política libre de megaminería.